Acabo la canción...

- Abre una nueva entrada...
- Mira a su alrededor...
- Juega con las mangas de su suéter...






Te voy a escribir una bonita historia de amor, solo para que sepas que si se querer, que tengo bonitas ideas de ti y que... pues simplemente me gusta a veces escribir.


Te voy a contar sobre mis miedos, nada mas para que entiendas que soy muy mortal, muy llena de vida y que no quiero perder todo eso.


Te voy a dibujar varias cosas, te vas a dar cuenta que puedo llenar tu vida de color.


Te voy a dejar de querer, solo para ver si te das cuenta que soy todos los días que elegiste ignorar.


Te voy a volver a querer para que sepas que eres todo lo que necesito.


Te voy a sonreír cada que pueda por si necesitas un poco de felicidad.


Te voy a mirar a lo lejos por si un día quieres voltear a mirarme tú tambien.


Te voy a ...




Y ella dejo de escribir porque se acabo la canción que reproducía su Ipod:  All I need - Radiohead.

Alguien ya no me esta queriendo.

- No puedo ya unir ideas... ya no puedo...



Nadie me esta queriendo.

Ella estaba ahí, tirada en la cama, sola, triste y con el rostro lleno de lágrimas, las secaba y están volvían a cubrir su rostro como una manta hace al cuerpo frío. Se sentía algo inútil, incluso idiota. 

Lo anhelaba, lo quería y no entendía porque sentía esa necesidad de quererlo tanto sin que él hubiera sido en su vida, quizás los besos no eran nada, las bellas palabras, la música, los pequeño recuerdos, todo… todo lo que ahora la hacia hundirse en lo profundo de su ser, quizás no sabe que a veces la gente si confía en dar el corazón por alguien, se decía sin dejar de apretar sus puños a ese hueco que sentía en el pecho.

Se sintió más sola, recordó el momento perfecto cuando por primera vez él le sonrió, ella le respondió la sonrisa y dejo de sentir miedo a querer a alguien. Suspiro con mucho dolor y dejo de llorar para incorporarse a ese shock que sintió cuando hablo por ultima vez de su querer, ella dejo de sentir el cuerpo, no podía llorar y mucho menos gritarle que se callara y la dejase quedarse en la vida de él.

Ella se encontraba algo destruida, bueno… eso sentía.

Los días empezaron a pasar... un día tras otro, no aguantaba el dolor, no lo aguantaba. Y una tarde decidió  que lo iba a querer hasta su ultimo suspiro, se puso su vestido favorito, uno de pequeñas flores violetas, aquellos zapatos que nunca uso y salió a dar una vuelta a su árbol favorito. Cuando el sol se empezaba a ocultar cerro los ojos y nunca los volvió a abrir.